Oh Gran Espíritu, cuya voz yo escucho en los vientos,
Y cuyo aliento da vida a todo el mundo,
Escúchame. Yo soy pequeño y débil. Necesito tu fortaleza y sabiduría.
Y cuyo aliento da vida a todo el mundo,
Escúchame. Yo soy pequeño y débil. Necesito tu fortaleza y sabiduría.
Permíteme caminar en la Belleza, y hacer que mis ojos siempre contemplen el atardecer rojo y púrpura.
Haz que mis manos respeten las cosas que has hecho y que mis oídos sean agudos para escuchar tu voz.
Hazme sabio para que así yo pueda entender las cosas que Tú has enseñado a mi Gente.
Permíteme aprender las lecciones que Tú has ocultado en cada hoja y roca.
Haz que mis manos respeten las cosas que has hecho y que mis oídos sean agudos para escuchar tu voz.
Hazme sabio para que así yo pueda entender las cosas que Tú has enseñado a mi Gente.
Permíteme aprender las lecciones que Tú has ocultado en cada hoja y roca.
Yo busco fortaleza, no para ser más grande que mi hermano, sino para pelear mi más grande enemigo, yo mismo.
Hazme siempre listo para venir a Ti con manos limpias y ojos directos.
De manera que, cuando la vida se desvanezca como el desvaneciente atardecer,
mi espíritu pueda venir a Ti sin ninguna vergüenza.
Oracion Indigena Norteamericana
Hazme siempre listo para venir a Ti con manos limpias y ojos directos.
De manera que, cuando la vida se desvanezca como el desvaneciente atardecer,
mi espíritu pueda venir a Ti sin ninguna vergüenza.
Oracion Indigena Norteamericana
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